Historias de amor en tiempos de guerra - Cap. 1

Capitulo 1 - Torneo de sectas

Presente 1

Año 938 después de la desaparición de las mujeres.

El lejano país de Ai, que estaba alejado del continente y rodeado sólo por océano, se dividía en doce territorios, los cuales, desde que terminó la guerra de las calderas, habían sido protegidos y gobernados por sus respectivas sectas cultivadoras.

Todas las sectas se reunían, varias veces cada año, ya sea para fiestas, para asambleas o para torneos. Dichas reuniones eran realizadas en la isla central, que yacía justo en el medio del país y estaba supuesta a no pertenecer a ninguna secta.

Nuestra historia comienza entonces, en un torneo de cultivación, en dicha isla.

El torneo fue organizado por la secta líder del país, la secta Jin, la cual era liderada por Jin Guangyao.

- Mi señor, los preparativos para las competencias están listos

- ¿Quiénes han llegado?

- Los participantes de las sectas Gusulan, Nie, Meishan y Su ya están en la isla, vienen en camino a la formación. Aún no ha llegado ningún líder, mi señor.

Por protocolo, los discípulos de las sectas de cultivación, que participarían en las competencias, llegaban antes que sus líderes; de hecho, los líderes entraban solo cuando todos los miembros de todas las sectas estaban presentes.

Cuando todos discípulos ya se encontraron en sus formaciones designadas, siendo todos jóvenes, como era de esperarse, empezó el cuchicheo.

Pero la habladuría de aquella ocasión era una inusual, todos estaban inquietos.

La razón era sencilla: Lan Wangji había sido designado, hacia un mes, como el líder de la secta Gusulan.

- Pues todo indica que si es verdad pero yo, hasta que no lo vea, no lo voy a creer

- Es verdad, y eso no es todo, dicen, y en un rato será comprobado, que Lan Wangji porta un traje de luto, honrando al infeliz de su marido. ¡No tiene decencia alguna!

- No, y lo peor, mi padre dice que antes era muy conocido por ser el más recto y honrado de todos, y ahora mírenlo, verdaderamente las apariencias son solo apariencias. El honor de la secta Gusulan no es más que un chiste.

Muchos años atrás, Lan Wangji y su hermano mayor, Lan Xichen, eran apodados como los jades de Gusu, por su aspecto impecable y hermoso, y por su actitud honrada y pulcra. Pero ahora, ambos hermanos eran conocidos como los viudos, y el concepto que se tenía de ellos había cambiado bastante debido al matrimonio de Lan Wangji.

Lan Wangji era el viudo del mismísimo patriarca Yiling.

Aquel matrimonio había impactado a todo el país, todo el mundo habló de eso, no había nadie que no lo hubiese mencionado al menos una vez: el recto, puro y honrado jade, líder de la secta Gusulan, conocida por ser la más estricta y decente de todas, mandando todo al demonio, para desposar a nadie más que al mismísimo patriarca Yiling que, para ese momento, ya tenía el odio de todas las sectas encima.

Llegando tan lejos incluso para tener hijos con él.

- Ciertamente un chiste. Todo es pura fachada. Dicen que Lan Wangji, luego de la muerte del patriarca Yiling, ciertamente tuvo la decencia de irse lejos con sus bebes, que para aquel entonces tendrían como un año...

- ¡Menos! Tendrían como un mes

- Los gemelos tendrían como un mes, pero hay otro, el mayor, que se dice que nació incluso antes de que se casaran, fuera del matrimonio, ¿puedes creerlo?

- Aunque también dicen que ese niño...

- Bueno, ¿Qué importa? No me interrumpan, el punto es que quiso huir con ellos, irse lejos, pero aparentemente Lan Xichen y su tío, Lan... ¿Cuál era su nombre?

- Lan Qiren

- ¡El mismo! Lo buscaron por mar y tierra hasta dar con él y ofrecerle ir a Gusulan con ellos.

- Ja! No les importó nada, ni que él fuese un traidor ni que esos niños fueran los hijos de aquel desgraciado

- No, y ahora las cosas están completamente diferentes, incluso Jiang Cheng...

- ¿Quieren callarse? - Uno de los principales discípulos de la secta Ba interrumpió el malicioso cuchicheo del grupo de discípulos.

- ...

- ¿Qué sucede? Con tanta gente hablando, nadie va a escucharnos, además, estamos diciendo solo la verdad

- Primero, si yo los escuché, tengan por seguro que alguien más podría escucharlos

- ...

- Segundo, están diciendo sólo verdades del pasado, y no le están prestando la más mínima atención al presente. Díganme, ¿Cuáles son las sectas más poderosas después de la Jin?

- La secta Nie, la secta Jiang, la secta Qin y la secta Gusulan

- Exacto, son sólo cuatro, y dos de ellas están siendo lideradas por los dos viudos de los cuales ustedes están hablando sin reparo, ¿Se habían dado cuanta de ello?

- ...

- Además, todo el mundo sabe que Jin Guangyao siempre ha estado embelesado por Nie Xichen, y no se ha casado con él porque Nie Xichen no ha querido, pero en cualquier momento acepta y listo, es el señor de la secta líder de todas las sectas...

Continuó, "La secta Gusulan puede no tener ahora la reputación honorable de antaño, pero escúchenlo bien, creo que nunca habían tenido tanto poder como ahora..."

Ciertamente, nunca lo habían tenido.

Los miembros de la secta Gusulan, a diferencia de los de las otras sectas, no eran criados para casarse con alguien que le diese más estatus y poder a su secta. De hecho, no eran criados para casarse.

Al haber sido la secta fundada por monjes budistas, para ellos no era mal visto no casarse, a diferencia del resto de las sectas, las cuales esperaban el momento en que sus hijos cumplieran los catorce para desposarlos con hombres prominentes y lograr beneficios con ello.

Adicional, en el mundo de la cultivación, ser casado era de mucho estatus.

La única excepción a esto eran los de la secta Gusulan, ya que, conociendo su historia, la gente no esperaba de ellos muchos matrimonios, apenas uno por generación y eso para conservar el linaje, y no eran conocidos por tener muchos hijos.

Todos pensaban que el único que brindaría hijos en esa generación era Lan Xichen, quien se habia casado con Nie Minjue, el primer hijo de la secta Nie, a los dieciséis años, siendo entregado a la secta Nie y obteniendo el nombre de casado: Nie Xichen.

Nadie jamás podría haber imaginado que Lan Wangji, el siempre serio e inexpresivo, podría llegar a enamorarse tan apasionadamente de alguien, hasta el punto de escapar de su secta y casarse sin la bendición de Lan Qiren, y de paso tener tres hijos.

Si no hubiese ocurrido, nadie lo habría anticipado.

Sin embargo, así sucedió, pero esa es una historia que conoceremos más adelante. 

Lo cierto es que ya habían pasado muchos años de eso; el matrimonio entre Lan Wangji y Wei Wuxian había durado apenas poco más de un año pues este último murió, y lo que se sabía que había ocurrido después de eso, es que Lan Wangji, junto a los hijos de ambos, había querido vivir en el exilio junto a ellos.

Pero Lan Qiren decidió perdonarlo y lo dejó volver a la secta Gusulan con los niños, en donde habían estado prácticamente encerrados los últimos diez años, tras los cuales, Lan Qiren no solo parecía haberlo perdonado del todo, sino que incluso, llegó a nombrarlo nuevamente líder de la secta Gusulan.

La gente no entendía cómo podía haber pasado aquello, pues la razón no era de saber publico, se trataba de algo bastante intimo: Lo que había ablandado el corazón de Lan Qiren, hasta el punto de confiar plenamente en su sobrino, como antes, habían sido sus adorables sobrinos-nietos.

Wei Wuxian y Lan Wangji habían tenido tres hijos: Lan Sizhui, el mayor, y dos adorables gemelos. La verdad era que estos seres eran simplemente encantadores, y todo el que los conocía caía rendido a sus pies.

Lan Qiren fue una de sus primeras víctimas tras su llegada a la secta Gusulan, y es que ¿Cómo podría permanecer enojado teniendo a esas adorables criaturas cerca?

A veces, Lan Qiren miraba a los gemelos jugando en los jardines o Lan Sizhui le dedicaba una de sus hermosas y sinceras sonrisas y se preguntaba como seres tan hermosos, tan inocentes, podían ser hijos de "ese sujeto".

Adorando a sus sobrinos-nietos, como los adoraba, a Lan Qiren le fue imposible mantener el desprecio en su corazón por mucho tiempo, así que no le quedo más que perdonar a su sobrino, y ahora, diez años después de la caída del patriarca Yiling, Lan Qiren, por segunda vez se había retirado y por segunda vez, Lan Wangji había quedado al frente de la secta Gusulan.

Aquel torneo, no solo representaría la oficialización del liderazgo de Lan Wangji ante el mundo de la cultivación (por segunda vez) sino que sería la primera vez que él y los niños saldrían de la secta Gusulan y se dejarían ver, luego de la caída del patriarca Yiling.

Todo el mundo estaba impaciente, todo el mundo quería verlos. Querían ver si los rumores eran ciertos, confirmar toda la historia con sus propios ojos. No querían perderse ni un solo detalle. Definitivamente, Lan Wangji era el líder más esperado del evento.

- ...y eso suponiendo que los rumores no son ciertos, ya saben, los rumores que dicen que el patriarca Yiling, en efecto, fundó una secta demoníaca, y tras su muerte, ahora Lan Wangji, es el actual líder de dicha secta, es decir que Lan Wangji sería el líder de dos sectas...

- ¡Es verdad! Mi padre semilla me contó que...

- Muchachos, ya cállense, ya van a entrar los lideres...

Todos los jóvenes de las sectas se organizaron en la formación, al darse cuenta del comienzo de la entrada de líderes.

Un muchacho de la secta Jin se posicionó a un costado del pabellón de líderes, para nombrar a los líderes que irían pasando.

Los líderes asistían a esas reuniones junto a sus familias y entraban individualmente, a medida que eran llamados.

El primero en ser llamado, fue el líder de la secta Meishan, y de segundo entró el líder de la secta Su.

- Jiang Cheng, líder de la secta Jiang

El líder de la secta Jiang, fue el tercero.

Si bien no era la persona que todos esperaban ese día, nadie podía evitar mirar con atención, y lo que es más, con admiración.

Jiang Cheng tenía treinta y dos años, por lo que era el tercer líder más joven del mundo de la cultivación (en Ai). Su belleza era indiscutible, y con su traje de casado se veía como un ser supremo.

Culturalmente, los cultivadores casados, tenían derecho a portar trajes especialmente elegantes y costosos, siendo los únicos que podían portar accesorios de oro, como muestra de su estatus matrimonial.

Por supuesto, estos trajes variaban dependiendo del poder adquisitivo de la pareja.

La secta Jiang era una de las sectas más ricas, y como los líderes de las sectas que eran, igual o más adineradas que la Jiang, no tenían el estatus de casados, la mejor vestimenta matrimonial del mundo de la cultivación, la portaban Jiang Cheng y su marido.

El matrimonio llevaba puesto kimonos holgados, grandes y elegantes; de tonos purpura, representativo de su secta; hechos de materiales finos y con un diseño impecable, siendo los accesorios de oro, la cereza del pastel.

Además, ambos traían maquillados los ojos, con tonos parecidos al de sus trajes. Esto no era muy común, era sólo usado por los devotos a las creencias originarias.

Pero a pesar de no ser común, por el contrario de hacerlos ver mal, resaltaba aún más su exquisita apariencia.

Parecían una pareja sacada de una leyenda. Muchos jóvenes pensaban que los dioses, en definitiva, debían portar trajes parecidos a esos.

Detrás de ellos, iban sus cinco hijos, en fila de mayor a menor. Todos con impecables vestimentas, parecidas a las de sus padres pero no tan holgadas o llamativas, y sin oro, aunque eso no les quitaba lo elegante.

Todos los hijos de Jiang Cheng eran hermosos, pero los que más llamaban la atención eran el mayor y el menor.

El hijo menor, Jiang Ziyuan, destacaba sencillamente por ser adorable, al tener solo tres añitos, le costaba seguirles el paso a sus hermanos como en los ensayos, ya que todos alrededor, los colores y las banderas, lo distraían.

Además, era la primera vez que caminaba con sus hermanos, pues hasta esa ocasión, uno de sus padres siempre lo llevaba en brazos.

En cuanto al mayor, Jiang Ling, llamaba la atención de manera más sexual. Era un precioso muchacho de trece años, alto, con pelo largo, rostro impecablemente bello y la cereza del pastel: era matriz, al igual que Jiang Cheng.

Lo cierto es que, por su belleza y su estatus, muchos lo miraban con atracción, aunque muchos sabían también que no era conocido por tener un carácter sencillo.

Se decía que era presumido y de mal genio, y de hecho se podía apreciar en ese preciso momento, en la expresión de superioridad que mantenía.

Al llegar al final del camino alfombrado, la familia se dividió, Jiang Ling se fue al frente de la formación de su secta, mientras que los niños se dirigieron a un área específica para los hijos de los líderes que tuvieran entre tres y doce años.

Esta área estaba diagonal al pabellón de líderes, y estaba conformada por ordenadas filas de cojines acolchados divididos en los colores de las sectas.

También había dos muchachos de la secta Jin para supervisarlos. Los cuatro niños se sentaron en la fila de cojines purpura.

Por último, Jiang Cheng y su esposo subieron las escaleras del pabellón, saludaron debidamente a los otros líderes y se sentaron en la mesa reservada para su secta.

Todas las mesas, de todos los líderes, estaban decoradas acorde a su secta, y tenían la vajilla preparada para el té, de modo que, en cuanto se sentaran, un joven vendría a servirles. Cabe destacar que si fuera en la tarde o en la noche, se les habría servido licor a los líderes, pero al ser apenas las ocho de la mañana, servir té era más apropiado.

Luego de Jiang Cheng, pasó el líder de la secta Ba. De quinto, entró el líder de la secta Qin, para después sucederle el líder de la secta Ling.

- Nie Xichen, líder de la secta Nie, viudo de Nie Minjue, originario de la secta Gusulan

Todos, igualmente, prestaron atención.

El físico de Nie Xichen era de ensueño, poseía una belleza hipnotizante, una apariencia impecable, todo parecía perfecto en él...

Pero su belleza actual no se comparaba a la de antaño.

La razón era sencilla: el luto. 

Nie Minjue había muerto hacía siete años, dejando a Nie Xichen sólo con el hijo de ambos y llevándose con él parte de Nie Xichen, quien en verdad lo amaba y lo seguía amando.

De modo que, los hermosos ojos de Nie Xichen, que antes estaban llenos de vida, ahora parecían casi del todo muertos. Su sonrisa ya no era sincera como antes; seguía siendo amable, pero carecía de autenticidad; y emanaba un inexplicable aire frío, que no era el usual aire frío de los Gusulan, era uno mucho más helado, uno...triste.

Aun así, Nie Xichen no se quedaba atrás en belleza y elegancia.

Su atuendo era holgado, grande y elegante, igual que el de un casado, y estaba bellamente adornado con exquisitos accesorios de plata (mientras que sólo los casados podían usar oro, los viudos sólo podían usar plata).

El traje era negro, para representar su luto, pero el cinturón y la bata interna (que sobresalía en el cuello y las mangas) eran de tonos verdes, los colores de la secta Nie, en homenaje a su difunto esposo y la secta que ahora era su hogar.

El diseño era espectacular, y el traje muy costoso. Era una belleza y elegancia triste, pero inexplicablemente cautivadora.

Por otra parte, atrás de él, caminaba a paso firme el único hijo que Nie Minjue y él habían tenido, Nie Yamei.

Nie Yamei, ciertamente, era la viva imagen de su difunto padre, era un hombre alto y fuerte, valiente y talentoso, además de muy seguro de sí mismo. Sin embargo, si había heredado ciertas cosas de Nie Xichen: Sus ojos de diferentes colores claros y su cabello suave, oscuro y largo. Además, su carácter era menos fuerte que el de Nie Minjue.

Tenía 18 años, sin embargo, no estaba casado, por lo que todavía vestía traje de soltero, que era parecido al del resto de los jóvenes de su clan.

Todos los jóvenes solteros usaban trajes sencillos y cómodos (Ciertamente costaba una temporada acostumbrarse a los trajes de casado). No usaban ningún accesorio, y si lo hacían, debían ser de materiales menos costosos y pesados que el oro y la plata.

Al terminar el paseo alfombrado, Nie Yamei se dirigió al frente de la formación de su secta y Nie Xichen subió el pabellón.

- Lan Wangji, líder de la secta Gusulan

Finalmente, el momento que todos estaban esperando.

Al oír el nombre, ciertamente todos abrieron los ojos y vieron fijamente la entrada.

Entonces entró Lan Wangji.

Al haber pasado diez años desde la última vez que Lan Wangji estuvo fuera de la secta Gusulan, sin mencionar el año anterior, en el cual estuvo aislado junto al patriarca Yiling; los jóvenes que ahora lo observaban, o nunca lo habían visto en sus vidas, o eran muy pequeños entonces para recordarlo, así que para todos, fue como una primera vez.

Lan Wangji y su hermano, ciertamente, siempre se habían parecido mucho en apariencia, tanto, que parecían gemelos. Lo que los diferenciaba era su personalidad, que era completamente contraria.

Mientras que Nie Xichen tenía una personalidad amable y pacífica, Lan Wangji siempre había sido frío e indiferente, y especialmente en esa ocasión, emanaba una fuerte ola de frialdad e indiferencia, ligada con una tristeza de luto, muy semejante a la de su hermano.

Pero también caminaba con mucha seguridad, lo cual, le daba un aire muy masculino que quedaba muy bien con su aspecto.

Su aspecto era simplemente magistral, su traje era semejante al de su hermano, pero la diferencia, y que fue lo que le abrió la boca a más de uno, es que, las partes que en el traje de su hermano eran verdes, en el traje de Lan Wangji, eran de tres colores: blanco, rojo y negro.

Wei Wuxian, el patriarca Yiling, a pesar de que fue criado por el antiguo líder de la secta Jiang, Jiang Fengmian, como si fuera su hijo, nunca pudo darle el apellido. Por ende, Lan Wangji, aparentemente, no obtuvo cambios en su nombre al casarse, y su cinturón y bata interna, deberían ser blancos, que es el color de su secta de origen.

El hecho de que tuvieran rojo y negro, sólo insinuaba la existencia de una secta, de la cual se había rumoreado por muchos años. Una secta demoníaca, fundada por el patriarca Yiling, que según se decía seguía existiendo en secreto y a la cual se le atribuía una larga lista de delitos luego de la muerte del patriarca Yiling.

No obstante, nadie nunca había visto a ningún miembro de dicha secta, ni antes ni después de la muerte de Wei Wuxian. Pero todos estaban de acuerdo en una cosa, de existir, definitivamente sus trajes serian negros y rojos, que eran los colores del patriarca Yiling.

No solo los jóvenes se asombraron ante lo que veían, y se asustaron con sus propios pensamientos, también los líderes de las sectas, a excepción de Nie Xichen y Jiang Cheng.

Pero lo que sintieron los lideres no solo fue sorpresa y algo de miedo, también era ira. Sin embargo, nadie hizo ni dijo nada, tal vez por la actitud fría, indiferente y segura de Lan Wangji, o tal vez porque esperaban que alguien más diera el primer paso.

Lo cierto es que el ambiente se tensó sobremanera, pero luego pareció calmarse cuando tres figuras entraron detrás de Lan Wangji.

El primero era Lan Sizhui, un hermoso muchacho de dieciséis años. 

Era una autentica belleza, su caminar era tranquilo y elegante, sus claros ojos estaban llenos de vida, como los de Nie Xichen, antes de enviudar; y su sonrisa era simplemente cálida.

Muchos muchachos se quedaron embobados al verlo, y portando éste el traje de soltero de la secta Gusulan, dejaron los rumores acerca de Lan Wangji completamente de lado, pensando que quizás lo mejor sería mantener la convivencia y dejar el pasado en el pasado, si es que esperaban poder cortejar a su hijo mayor.

Pero luego, las miradas se concentraron en dos pequeñas figuritas que caminaban una al lado de la otra, atrás de Lan Sizhui.

Eran dos hermosos y encantadores gemelos, tan bellos, que parecían hijos de la luna. Sus ojos eran claros, como los de su padre y su tio Lan Xichen, pero más grandes. Tenían una piel blanca y cremosa, y un cabello oscuro, largo y abundante.

Sus nombres eran: Lan Bao y Lan Yu, ambos tenían diez años.

Lan Bao miró a su alrededor, parecía algo nervioso ante las miradas de todos, mientras que Lan Yu sólo miraba al frente, con los ojos semi-cerrados y con la cabeza en alto.

- A-Yu, todos nos están mirando...

- Por supuesto, hermano, no pueden dejar de admirarnos

Lan Yu levantó más la cabeza susurrando esto. A diferencia de Lan Bao, que no lo pensó mucho, Lan Yu se había preparado mucho para ese momento y estaba decidido a mostrarle al mundo lo divino que era.

- No, hermano, no pareciera que nos estuvieran admirando...

- ¡Entonces nos envidian! No todos pueden ser divinos como nosotros

- Más bien, están como examinándonos

- ¡Que lo hagan! Tu mantén la frente en alto

Lan Bao vio a su hermano y trató de imitarlo, mientras que todos seguían observando, solo observando.

Los pensamientos dentro de la cabeza de todos los presentes eran sumamente variados, pero nadie dijo nada.

Al terminar el camino alfombrado, los gemelos se fueron al área de los niños.

Los asignaron al lado de los niños de Jiang Cheng. De inmediato, los cuatro niños Jiang se saludaron enérgicamente con los gemelos, dando a entender a todos, que no era la primera vez que se veían.

En cuanto a Lan Sizhui, se posiciono al frente de la formación de la secta Gusulan.

Lan Wangji subió por el pabellón. Se limitó a responder los saludos que le brindaban inclinando levemente su cabeza, sin decir una palabra.

No todos los líderes lo saludaron.

A él no podría haberle importado menos.

Hasta que finalmente se sentó en la mesa asignada a la secta Gusulan.

Luego de Lan Wangji, pasaron los líderes de las sectas Yu, Shan y Ai, para finalizar con Jin Wangyao, el líder de los líderes.   

..::Notas de la autora::..

Muchas gracias por empezar a leer esta historia, de verdad que me he esforzado porque está un poco larga pero ha valido la pena porque he disfrutado mucho haciéndola. 

Hay dos cositas que quisiera comentar:

   1.   Los nombres chinos pueden ser un poco confusos, así que no se preocupen, aquí no hay nombres de nacimiento, nombres de cortesía y todo eso...todos tienen un solo nombre, que es el que viene después del apellido.

En el caso de los nombres de casados, son parecidos a los que conocemos, solo que en chino, el apellido va primero. Por ejemplo, Lan Xichen, ese es su nombre de soltero, pero al casarse con Nie Minjue y ser entregado a su secta, pasó a ser Nie Xichen.

Esto de las entregas lo veremos mas adelante en la historia, pero les adelanto que no tiene nada que ver con que sean matrices o semillas, ni tampoco si son los ukes o los semes.

   2.   Seguramente es confuso eso de los hombres semilla y los hombres matriz. Más adelante, les prometo que todo quedará bien explicado, por lo pronto les comento que los matrices son aquellos capaces de dar vida, los semilla no, pero pueden reproducirse con los matrices.

Matrices con matrices, pueden reproducirse. Semillas con matrices, pueden reproducirse. Semillas con semillas, no pueden reproducirse.

La historia nos explicará detalladamente todo esto, y que fue lo que pasó con las mujeres, y todas la incógnitas, así que no se preocupen.

Nos leemos en el próximo capitulo!

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